Llegan a un restaurant un señor con un monumento de mujer y un pingüino. El recepcionista le pregunta:
- ¿Mesa para dos?
- No, para tres. El pingüino viene conmigo.
El hombre queda sorprendido pero les da la mesa. Ya sentados los comensales, el mesonero pregunta:
- Señor, ¿qué desean tomar?
El señor dice:
- A mí una copa de whisky Etiqueta Azul, una de champaña Möet & Chandon para la bella dama y al pingüino, 10 litros de cerveza.
El mesonero queda desconcertado, pero sirve lo que piden.
Terminan y el mesonero pregunta:
- Señor, ¿desea ordenar?
- Sí, gracias; me traes, por favor, un filete a la pimienta; a la bella dama un chateaubriand y al pingüino, 200 biftecs.
Cuando terminan de comer, el mesonero regresa y pregunta:
- Señor, ¿algún postre?
- Sí, por favor. Para mí, un pastel de queso con fresas; a la bella dama, una torta de almendras y al pingüino, 150 crepés con fresas y crema.
Al finalizar, el hombre pide la cuenta.
- Señor son 2,000 dólares más la propina.
El hombre le paga con efectivo y deja una propina de 300 dólares. Ya salían, cuando el mesonero lo detiene:
- Señor, disculpe que lo moleste, pero todos estamos asombrados con lo del pingüino.
- Bueno, déjeme explicarle: hace una semana iba por la playa y sin querer pateé una lámpara y resultó que era mágica. Total que sale el genio y me dice:
‘Te voy a conceder 3 deseos’.
Le pedí todo el dinero del mundo, así que para pagar una cuenta como ésta no tengo ningún problema.
Mi segundo deseo, fue tener a la mujer más bella, sexy y complaciente de todo el mundo.
- Se aprecia de una vez que le fue concedida, señor.
¿Y el tercer deseo?
- Pues el tercero fue que me diera un pájaro enorme, que siempre estuviera parado y que fuera insaciable…
Y me dio este pingüino hijueputa!
😬😝🙈😈😂😂😂
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